Los de Pedro Rivero arrasan a un Oviedo muy desacertado en el segundo partido del ‘play-off’ y viajarán a Asturias a sentenciar.
Tarde placentera la de este sábado en el Pabellón Municipal de Deportes de Palencia, donde el Zunder aprendió de los errores en el partido del jueves y arrasó a un Unicaja Banco Oviedo muy desacertado de cara al aro. Los de Pedro Rivero hicieron los deberes aprovechando el factor cancha, por lo que viajarán la próxima semana a la capital de Asturias con gran parte del trabajo hecho. Blumbergs, Ali y Mus Barro fueron los más destacados del equipo local, dejando una imagen sobresaliente. Además, la buena actuación coral del cuadro morado supone una inyección de moral con vistas a los encuentros venideros, si bien no deberá confiarse si quiere disputar la ‘final four’ de ascenso a la Liga ACB.
Las altas temperaturas de este sábado eran latentes sobre la pista, con un ritmo más pausado desde el inicio en comparación con el encuentro del jueves, además de las imprecisiones por parte de ambos equipos. El cuadro visitante, eso sí, arrancó con más acierto de cara al aro, pero fue rápidamente respondido por parte de los morados (6-6, min. 4). El Zunder Palencia no dudó en combinar la pelota con mayor rapidez, provocando una buena racha de triples a favor que obligó a Natxo Lezkano a pedir un tiempo muerto a falta de tres minutos para el segundo cuarto (16-8).
Speight y Blumbergs seguían machacando desde el juego exterior, mientras Jorgensen lideraba a los suyos para no quedarse atrás en el marcador. Un buen ‘pick and roll’ entre Dani Rodríguez y Mus Barro remató el primer cuarto con ventaja para el Zunder (25-11).
El duelo se atascó por momentos, con varias interrupciones y con ambos conjuntos buscando posesiones de balón más continuadas que en el primer cuarto. Tres minutos hicieron falta para que Noah Allen sumara los primeros puntos del segundo período, velozmente contestados por el equipo ovetense, lo que hizo que Pedro Rivero pidiera su primer tiempo muerto para reestructurar ciertos aspectos del juego (27-17, min. 15).
La conexión Speight-Rubio subió los decibelios del Pabellón, con un Zunder que comenzaba a acumular una renta muy favorable con la mirada puesta en la segunda mitad. Blumbergs, desde la línea de tres puntos, y Mus Barro con una gran jugada personal, terminaron de culminar una gran primera parte del equipo palentino, que llegó al tiempo de descanso con una buena ventaja para afrontar lo que restaba de partido (41-24).
Bajón tras el descanso
La vuelta tras el paso por vestuarios perjudicó ligeramente al conjunto local, que encajó cinco puntos sin apenas oposición nada más volver a la pista, algo que fue remendado casi al instante gracias al buen encuentro que estaba desempeñando Prince Ali en todas las facetas del juego.
Del lado carbayón, Jorgensen seguía a lo suyo, perforando la canasta desde la línea de tres. Aun así, cada amago de remontada visitante era sofocado al momento gracias a la buena muñeca de Speight y Blumbergs (58-37, min. 26). Este último sacó todos los recursos que tenía en la manga, levantando al Pabellón de sus asientos. El Zunder Palencia no bajó el pie del acelerador y llegó al último acto con un resultado que no podía dejar escapar (64-46).
Mus Barro se sumó a la fiesta con un tapón espectacular sobre Kabasélé, volviendo a encender los ánimos en la grada y metiendo presión a un Unicaja Banco Oviedo que cada vez tenía más difícil meterse en la lucha por la victoria. Dos minutos después, un contraataque liderado por Juan Rubio que él mismo finalizó cayó como un mazo sobre el juego del equipo asturiano. El murciano, con un recurso de mucha calidad, sorprendió al público con un 2+1 apoteósico. La diferencia de puntos era considerable, algo ante lo que el Oviedo poco pudo hacer.
Con el partido convertido en un correcalles, el Zunder Palencia redondeó una muy buena actuación a base de triples (83-70) y viajará a Oviedo con el camino despejado.
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