La Copa Mundial de Fútbol de la FIFA Catar 2022 es la vigésima segunda edición de la Copa Mundial de Fútbol masculino organizada por la FIFA. Se está desarrollando desde el 20 de noviembre al 18 de diciembre en Catar, que consiguió los derechos de organización el 2 de diciembre de 2010 a base de miles de millones de dólares que han servido para comprar a los corruptos dirigentes del futbol mundial, la FIFA, e infringir todo los derechos humanos sin reparo alguno con el beneplácito de los decadentes dirigentes políticos de Occidente.
Hoy hace una semana comenzó la vigésima segunda edición de la Copa Mundial de Fútbol organizado por la FIFA o lo que es lo mismo EL MUNDIAL DE LA SIN-VERGÜENZA.
Un mundial que jamás debería haberse celebrado en este país y en estas fechas. Un mundial que pone de manifiesto la total decripitud de los valores tradicionales europeos. Un mundial donde los decrépitos dirigentes del fútbol mundial encabezados por el corrupto presidente de la FIFA, Gianni Infantino, ha sucumbido a los petro-dólares en vez de a los valores tradicionales de occidente.
Desde hace ya muchos años el fútbol profesional tiene poco de deporte por no decir nada pero con este mundial, celebrado fuera de tiempo y lugar, ha llegado a lo más bajo de la decadencia de Occidente. Occidente ha renunciado a sus valores y a sus tradiciones para adherirse a los petro-dólares procedentes de la energía más contaminante de la actualidad: el petróleo. Los combustibles fósiles son un mierda de combustibles y en vez de deshacernos de ellos los promocionamos más y más con estos eventos “deportivos” anti todo.
Este mundial es el mundial del despropósito, es un mundial que ha costado en organizarlo 20 veces más que cualquier otro cuando más de medio mundo se muere de hambre. A base de talonario se ha conseguido todo lo inconseguible. A base de talonario se ha tapado el coste de vidas humanas que ha supuesto llevarlo a cabo hasta llegar al día de su inauguración sin que los medios de comunicación hayan hecho apenas hincapié en ello, también a estos han sabido comprarlos.
Este mundial, por tanto, es el mundial de la decrepitud Occidental que lo ha permitido. Nadie se extraña de que lo haya permitido la FIFA para quien el fútbol es su negocio particular pero lo que es vergonzoso e insultante es que los paises de la Europa Occidental y Central hayan perdido la celebración de tan esperpéntico acontecimiento, repito, fuera de tiempo y lugar. Occidente ha perdido su brújula y sus valores tradicionales sólo por dinero y más dinero sin interesar para nada todo lo demás; Occidente está perdido.
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