Aempatra pide que se regulen los precios del combustible y se fijen precios máximos. No se suma a la huelga, pero deja libertad a sus socios.
Muchos transportistas palentinos echarán hoy el freno de mano a sus furgonetas y camiones en señal de protesta por el aumento progresivo de los carburantes en las últimas semanas. Una subida de 70 céntimos el litro de gasoil desde que se estrenó 2022, según los datos facilitados por el gremio.
Si será o no un paro generalizado está por ver, pues quien lo secunde será a título particular. Y es que la Asociación Empresarial Palentina de Transportes (Aempatra), integrada en Confederación Española de Transporte de Mercancías (CETM), no se suma al llamamiento, sino que deja plena libertad de acción a sus 250 socios con los que cuenta en la provincia.
En cualquier caso, el presidente de Aempatra, Óscar Baños, sí habla de la absoluta desesperación que reina en el sector del transporte por carretera por el aumento sin freno de los precios y por otras medidas anunciadas por el Gobierno que aún no han entrado en vigor, como el peaje en las autovías.
«Nos enfrentamos a una subida brutal de 40 céntimos/litro en la última semana», lamenta. Un incremento en los costes que no repercute en los portes y que hace que arrancar el camión les salga muy caro a los profesionales del sector. «Perdemos dinero con el camión parado, pero también lo perdemos con él arrancado porque no cubrimos costes», especifica Baños.
Asimismo, pone cifras a lo que supone para la economía de autónomos, pequeñas empresas de transportes y grandes compañías ese aumento de 0,7 euros/litro de carburante. «A una media de gasto de 4.000 euros, habría que sumarle 2.800 en sobrecostes con la subida del combustible», recalca el presidente de Aempetra, quien afirma que ha habido jornadas en las que el gasoil ha subido «ocho céntimos el litro en tan solo 24 horas».
MEDIDAS EXCEPCIONALES
Desde Aempatra plantean la posibilidad, como posible alternativa a esta crisis que se está viviendo en el seno del transporte por carretera, de que el Gobierno establezca unos precios máximos para los carburantes. Una medida «extraordinaria para una situación que también lo es», afirma Baños, en alusión directa a la guerra con Ucrania. Un duro golpe para el sector, pues Rusia, a la que Bruselas y Estados Unidos someterán a importantes sanciones, «es el segundo productor de petróleo de Europa».
Por lo demás, y según ha sabido este periódico, se están preparando piquetes informativos a lo largo y ancho de la geografía española durante la jornada de huelga, que comenzó a medianoche convocada por la Plataforma para la Defensa del Sector del Transporte de Mercancías por Carretera. «Lo que tenemos que conseguir es que se prohiba contratar el transporte a pérdidas», insistía ayer su presidente, Manuel Hernández, en Facebook.
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