La oposición paraliza la modificación del Plan de Urbanismo del casco histórico. Los grupos políticos dan el dictamen favorable para su aprobación por el pleno a los cambios urbanísticos que piden los constructores.
Tanto el PSOE como Vox se atribuyen el mérito de haber logrado retirar del debate de la Comisión de Urbanismo el punto relativo a la modificación del Plan General correspondiente al casco histórico, que ha sido declarado bien de interés cultural. Fue una petición de la portavoz derechista que contó con el apoyo de los socialistas, grupo mayoritario en el Ayuntamiento, y también de Ganemos. Así, al haber quedado fuera, será muy difícil que pueda votarse en el pleno del jueves, aunque el equipo de gobierno todavía se plantea la posibilidad de convocar una nueva comisión informativa el miércoles, en la que explicar detalladamente el proyecto, con el fin de llevarlo de urgencia al pleno del día siguiente. Si no se logra, el objetivo es que pueda ser votado en el pleno de marzo.
Se trata de una modificación sustancial del planeamiento de toda la zona centro de la ciudad, por lo que el documento se compone de más de 1.400 páginas y numerosa documentación gráfica (todo tipo de planos), que se puso a disposición de los grupos hace una semana, tiempo insuficiente desde el punto de vista de la oposición para un estudio completo de la propuesta.
Además, la portavoz de Vox criticaba ayer en un comunicado que el equipo de gobierno concediese únicamente para el debate en la comisión un tiempo de menos de media hora, lo que calificaba como «una falta de respeto». Sonia Lalanda ha manifestado que es imprescindible una reunión presencial con el equipo redactor que explique todos los detalles y que sean posteriormente los grupos políticos, como representantes de los ciudadanos, los que elaboren la propuesta. Vox critica además que se planteen peatonalizaciones en vías tan importantes como la avenida de Castilla.
Mientras, los socialistas insisten en que una modificación urbanística que afecta a todo el diseño de la zona centro de la ciudad y áreas como el cerro del Otero precisan de un amplio debate social y ciudadano previo, antes de que se redacte una propuesta.
Pero aunque este asunto quedó fuera del orden del día, sí salieron adelante otras dos modificaciones urbanísticas que sí se debatirán en el pleno del jueves. Una hace referencia a cuatro puntos concretos del planeamiento relativos a la construcción de viviendas o la reforma de inmuebles, cambios que han sido solicitados por la Asociación de Empresarios de la Construcción (Aecopa). La modificaciones hacen referencia a cuestiones como la creación de garajes, el número de trasteros o las viviendas de interior en patio de manzana cerrada.
Ademas, se ha dado el visto bueno al cambio de calificación urbanística de los terrenos colindantes al Centro de Tratamiento de Residuos para que se transformen en suelo de servicios, en lugar de equipamientos, lo que conjuga con la ley y facilitará las expropiaciones para la ampliación solicitada por Acciona, que gestiona el CTR.
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