El Pleno del Ayuntamiento de Palencia despide a casi la mitad de la corporación

El pleno se cerró con la intervención del alcalde en funciones, Mario Simón, quien recalcó que haber asumido este puesto durante los últimos cuatro años ha sido el «mayor orgullo y la mayor satisfacción» posibles.

Se le quebró la voz por momentos, aunque intentó controlarse y pudo finalizar su discurso con cierta entereza. Pero no logró evitar que la emoción le traicionase en algunos instantes. Y no era para menos, no solo estaba despidiendo a once compañeros que no continuarán en el Ayuntamiento de Palencia en el próximo mandato, sino que también se estaba despidiendo él mismo, puesto que tampoco resultó elegido en las pasadas elecciones municipales y, por tanto, tampoco podrá revalidar el acta de concejal que ha ostentado durante los últimos ocho años. Los primeros cuatro como edil en la oposición y los más recientes como alcalde de Palencia, al frente de un grupo formado por tan solo tres concejales, aunque en coalición con otros nueve del PP.

Porque Mario Simón, en su calidad de alcalde en funciones, labor que debe continuar otro par de días completamente en solitario, ya que la corporación ha quedado disuelta y el nuevo pleno no se constituye hasta el sábado, fue el último en tomar la palabra en esa postrera sesión del mandato, en la que tuvieron que aprobarse también las actas de los dos plenos anteriores. Todo sin novedad y con el consentimiento de todos y cada uno de los concejales.

Fue la última decisión adoptada por el pleno del Ayuntamiento de Palencia antes de que quedase disuelta la corporación municipal, de la que se despiden de forma definitiva doce de sus 25 miembros, prácticamente la mitad. Los otros trece restantes deberán tomar posesión de su acta de concejal y jurar el cargo en la sesión prevista para el medio día del sábado, en la que debe elegirse también al nuevo regidor -todo parece apuntar a que será alcaldesa- de la capital palentina.

Una vez aprobadas las actas de las sesiones anteriores se abrió un turno de palabra, en el que pudieron intervenir todos los concejales que lo desearon, aunque finalmente, los discursos se limitaron a los que ofrecieron los portavoces de los diferentes grupos políticos, así como al que lanzó el exconcejal de Hacienda, Luis Miguel Cárcel, del PP, que se encuentra entre los que no continuarán en el Ayuntamiento.

Cárcel, que recordó las graves dificultades a las que ha tenido que enfrentarse el equipo de gobierno en este mandato, como la pandemia, las negociaciones de la calle Jardines, el incremento de los precios o el vencimiento de los contratos públicos, quiso también agradecer el trabajo y la colaboración de todos los grupos políticos y en especial de los trabajadores del Ayuntamiento. «Yo lo que deseo es el éxito de la próxima corporación, porque el éxito redundará en el bienestar de los ciudadanos y la buena marcha de Palencia», manifestó el ya exedil, al tiempo que se ofreció a la nueva corporación para cualquier necesidad.

Intervino en primer lugar la hasta ahora portavoz de Ganemos, Sonia Órdoñez, quien se definió como «activista», antes que política, por lo que aseguró que seguirá trabajando desde diferentes ámbitos y organizaciones en favor de la ciudad de Palencia, dado que no seguirá en el Ayuntamiento. Por su parte, la portavoz de Vox, Sonia Lalanda, una de las que sí continuará en la corporación, destacó la importancia de las relaciones personales y los lazos que se establecen entre los miembros de la corporación, que sirven para reforzar la posibilidad de buscar entendimientos para impulsar el desarrollo de la ciudad de Palencia. Lalanda manifestó que ha sido un placer trabajar con todos los miembros de la corporación y expresó su deseo de que la próxima investidura de día 17 transcurra con una mayor normalidad que la de hace cuatro años, «cuando vivimos situaciones muy desagradables, incluso con insultos graves hacia Vox y mi persona».

La concejal de Vox lanzó también un agradecimiento expreso al alcalde por su dedicación intensa, «durante las 24 horas del día» durante la etapa de pandemia.

Se despidió también de la corporación el portavoz de Ciudadanos y concejal de Desarrollo, Urbano Revilla, que abandona la corporación junto a todo su grupo, ya que la formación naranja no ha obtenido ningún representante, con lo que también se marcha el alcalde, Mario Simón. «Quiero dar mi agradecimiento a los 25 concejales, porque he aprendido de todos ellos, y también nos hemos ayudado y hemos trabajado, haciendo lo que teníamos que hacer, por el bien de Palencia», recalcó Urbano. También Revilla quiso hacer un reconocimiento a sus compañeros de partido, la edil Carolina Gómez, y el alcalde, Mario Simón, de quien destacó su dedicación absoluta durante los cuatro años.

Por su parte, Alfonso Polanco, cabeza de lista del PP y teniente de alcalde los últimos cuatro años, tomó la palabra para agradecer el trabajo de toda la corporación, así como de los empleados municipales, pero hizo especial hincapié en la labor de los cuatro ediles de su grupo que no continuarán, glosando la figura de todos ellos y recordando su aportación a lo largo del mandato. «Ha sido una legislatura muy compleja, marcada por la pandemia y que ha exigido una mayor dedicación para todos», recalcó.

También quiso intervenir en nombre del PSOE Miriam Andrés, que, del mismo modo, hizo referencia a un mandato «convulso», con unas primeras semanas que se convirtieron en un «trampolín emocional», al haberse formado un gobierno en el que no figuraba la lista más votada. Andrés deseó unas circunstancias diferentes para la nueva corporación, y recalcó que los 25 concejales deben considerarse por encima de todo «compañeros de trabajo, aunque con diferentes ideologías y formas de entender la gestión de lo público». Deseó éxito a la futura corporación, que según recordó representa a toda la ciudadanía de Palencia.

El pleno se cerró con la intervención del alcalde en funciones, Mario Simón, quien recalcó que haber asumido este puesto durante los últimos cuatro años ha sido el «mayor orgullo y la mayor satisfacción» posibles. El regidor manifestó que se marcha con la «certeza de haber dejado la ciudad y la institución mejor de lo que me la encontré». En este sentido, señaló que finaliza el mandato con la satisfacción del deber cumplido. «Desde que asumí el cargo de alcalde de Palencia, lo he dado todo, con absoluta entrega y dedicación, primando siempre el interés general por encima de cualquier otro; y he intentado ser ejemplar en mi conducta, con mi trabajo y en cada acto y en decisión tomada, en definitiva, estar a la altura de la responsabilidad que conlleva ser el alcalde del Ayuntamiento de Palencia, presidir esta corporación y representar a mi ciudad y a todos sus vecinos», manifestó Simón.

Asimismo, ofreció toda su ayuda a la nueva corporación. «Contaréis con mi apoyo como exalcalde siempre que lo consideréis, porque una vez que has sido alcalde, ese afecto y amor a la ciudad se lleva siempre, esa preocupación y deseo de que vaya todo bien permanece siempre. Por eso, sabed que ahí estaré si lo estimáis para ayudar o colaborar en todo lo necesario desde la sociedad civil , como hacen cada día muchos palentinos que trabajan diariamente buscando lo mejor para Palencia», indicó Mario Simón.